que es el sindrome del impostor y como superarlo

¿Qué es el síndrome del impostor y cómo superarlo?

¿Has sentido que tu puesto en la empresa es desmerecido? ¿Piensas que ese proyecto que has dirigido y que te valoran tan positivamente no es para tanto? ¿Consideras que tus logros son mayormente debido a la suerte y no a tu valía personal o profesional? Si te sientes así y piensas que tus éxitos no te pertenecen es muy probable que sufras del síndrome del impostor.

El síndrome del impostor (también denominado por algunos autores como síndrome del fraude) es un trastorno psicológico que impide que personas exitosas (especialmente en el ámbito profesional) asimilar su éxito como un logro fruto de sus capacidades de trabajo o intelectuales y lo achacan a factores externos, ajenos a ellos. Pero, además, parte de la angustia de estas personas radica en que anticipan que en cualquier momento se puede desvelar esta circunstancia y quedar expuestos como unos farsantes. Este síndrome, que afecta a personas altamente exitosas, tiene una mayor incidencia en trabajadores de entre 18 a 34 años y, con diferencia, lo sufren un mayor porcentaje de mujeres que de hombres.

Pero, ¿por qué ocurre esto? ¿Qué causa el síndrome del impostor en personas con gran éxito profesional?

Son varios los factores que influyen en el desarrollo de este trastorno pero una de las razones que afecta a más de un tercio de las personas con síndrome del impostor es la inseguridad, dudar de sus capacidades y su competencia personal y profesional. Otros motivos también bastante comunes que han revelado las personas afectadas son: recibir críticas externas (que los hacen dudar de sus capacidades); compararse con otros compañeros de éxito (no se valoran lo suficiente y siempre salen perdiendo en la comparativa); tener que solicitar ayuda para realizar su trabajo.

Estas causas dan lugar a distintos perfiles de personas con el síndrome del impostor:

  • Personas perfeccionistas que tienen que hacerlo todo bien y a la primera. Dentro de este grupo también podríamos incluir, como relacionados, aquellos que necesitan controlar y conocer exhaustivamente todo lo que hacen; esto, además de causarles un desgaste, también les hace perder eficiencia.
  • Profesionales muy capaces pero muy individualistas. Les cuesta pedir ayuda y, si lo hacen, ya no valoran los logros conseguidos.
  • Individuos con baja autoestima, aunque el exterior los valore (a ellos o su trabajo) ellos no se perciben como algo valioso.
  • Personas que quieren abarcarlo todo y, evidentemente, al no conseguirlo también se sienten frustrados e incapaces.

Como cualquier trastorno psicológico, el síndrome del impostor puede tratarse mediante terapia psicológica. El primer paso es identificar la patología, indagar sobre las posibles causas y actuar en función de las características de cada individuo. Si crees que tienes el síndrome del impostor no dudes en contactar con un psicólogo que te ayude a gestionar y superar tu miedo a ser considerado como un fraude.