No solo el peligro de enfermedad física e incluso riesgo de muerte acompañan al COVID-19. Las secuelas psicológicas que deja tras de si esta pandemia del Coronavirus nos afecta a todos en mayor o menos medida independientemente de que nos hayamos contagiado o no.
Desde el gabinete de psicología de Ismael Limones, gestionamos diariamente multitud de casos relacionados con los estragos que está suponiendo el la vida de las personas esta crisis sanitaria que vivimos a nivel mundial.
Es por ello que tal vez proceda un cierto análisis y recorrido por las secuelas psicológicas, traumas y trastornos más comunes que están aflorando entre la sociedad fruto de momento actual con la presencia del coronavirus entre nosotros.
Conocer, enfrentar y superar las secuelas psicológicas producto del Coronavirus.
Cuando atendemos en nuestras consultas de psicología de Ismael Limones a personas profundamente afectadas por la situación de pandemia actual, nos encontramos que algunos acuden tras haber superado la enfermedad de forma física, otros por haber perdido a algún familiar, otros por motivos laborales o problemas económicos, pero un importante porcentaje de ellos, sin encontrarse en ninguna de las anteriores situaciones, sufren importantes trastornos.
Algunas de las situaciones más habituales son:
- Miedo y angustia generalizada.
- Fobias varias.
- Trastornos del sueño y de la alimentación.
- Estrés.
- Ansiedad.
- Depresión.
- TOC (trastorno obsesivo compulsivo)
Las personas sienten miedo a relacionarse, a convivir de forma normal, por lo que el desarraigo, la soledad o la marginación también son habituales.
Muchos nos trasmiten que la llegada de la noche acentúa sus inquietudes, por lo que el sueño se ve igualmente afectado. Ello provoca cansancio, tristeza, falta de fuerza y de estímulos que afectan no solo a nivel personal sino en el rendimiento laboral.
La sombra de los contagios, de la posibilidad de enfermar, quedar con secuelas físicas de por vida o incluso la muerte producen una angustia constante que deriva en cuadros de ansiedad que en ocasiones conducen incluso a medicación combinada con las terapias adecuadas.
Han aumentado los cuadros de lo que se conoce como aprensión o peor aún de hiponcondría, convirtiéndonos en auténticos obsesionados por la higiene, las distancias, la desinfección, la ingesta de complejos vitamínicos y la asociación de cualquier síntoma a la posibilidad de padecer COVID-19.
Desde nuestra clínica de Ismael Limones ayudamos a nuestros pacientes a afrontar la realidad desde un escenario de responsabilidad y cuidado necesario pero con optimismo, fuerza y recuperación de la tranquilidad.
Aprendiendo a convivir y a aceptar la realidad actual sabiendo que poco a poco, con la ayuda de todos, volveremos a nuestras vidas de siempre superando estos problemas y evitando vernos afectados por secuelas psicológicas que podrían afectarnos seriamente si no se afrontan de manera profesional.
