timidez

La timidez

La timidez es un estado de ánimo que puede afectar a las relaciones personales de quienes la padecen. No es una enfermedad tal y como recoge su definición, sino una conducta en la que ciertas situaciones dan ‘apuro’ de afrontar.

Lógicamente, la timidez acarrea más inconvenientes que ventajas ya que puede coartar mucho el día a día de una persona. ¿Cuáles son las consecuencias más comunes de la timidez?

Consecuencias de la timidez

  1. Intolerancia a las críticas. Las personas tímidas suelen ser más susceptibles a éstas.
  2. Necesidad de aprobación. Para estar bien y no sufrir de más timidez, aún, buscan siempre la aprobación de todos para sentirse a gusto.
  3. Baja autoestima. Aunque no siempre es así, en ocasiones la timidez hace sentir a la persona que nadie le escucha lo que le provoca baja autoestima.
  4. Soledad. Si se deja llevar por la timidez, la persona puede rechazar relacionarse con otras y llevarlo a la soledad; aunque no la desee.

Ser tímido puede traerte muchas más consecuencias, negativas que positivas, pero también es importante saber de dónde proviene y tratar la situación, hechos o sentimientos que te han llevado a la misma. La ayuda profesional te será muy útil y contar con la ayuda especializada de un psicólogo hará que afrontes las situaciones que puedan provocarte esta timidez de la mejor forma posible.

¿Cómo afrontar la timidez?

  1. Enumera las situaciones que te provocan ansiedad. Seguramente tengas reconocidas las situaciones que más angustia te producen. Ordénalas en una lista, de menor a mayor. Esto de facilitará poder afrontarlas mejor.
  2. Divídelas y enfréntate a éstas poco a poco. Al dividirlas podrás enfrentarlas poco a poco de mejor manera. No es lo mismo afrontar un discurso completo que por partes.
  3. Si te paraliza, respira y afróntalo. Hay veces que es incontrolable sentirse paralizado, cuando te suceda, párate, respira y recuerda otras situaciones que te han hecho sentir así y que has afrontado de forma positiva. Así podrás afrontar aquellas situaciones que te paralicen sin razón.